La agencia Prensa Latina publicó este martes información que devela un plan de la oposición boliviana para evitar la repostulación del presidente Evo Morales antes del referendo del 21 de febrero y su posterior derrocamiento.
Este "Plan Estratégico para Bolivia", suscrito por el Instituto Interamericano para la Democracia de Estados Unidos, sostiene que "la democracia en nuestra América Latina está en peligro (...) secuestrada por gobiernos populistas, antisistema y caudillistas que prohíben, violan y amedrentan el pensamiento liberal".
El mencionado instituto es promovido por Carlos Sánchez Berzaín, político boliviano que escapó a Estados Unidos al ser acusado de asesinato por participar en la masacre de octubre de 2003, en el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, refiere Prensa Latina en su página web.
Dicho Instituto tiene como directivos a los contrarrevolucionarios cubanos Carlos Alberto Montaner y Alberto Valladares , además "recibe fondos del gobierno de Estados Unidos, país desde donde opera y financia a políticos latinoamericanos de ultraderecha junto a otras entidades auspiciadores".
Agenda desestabilizadora
"Generar emoción" utilizando mensajes orientados a problemas sociales a fin de generar descontento en la población, forman parte de las acciones de dicho plan, a través de campañas en prensa escrita, radial y televisiva, portales web, blogs, mensajes de texto y redes sociales.
"Crear masivas corrientes de opinión contrarios a los gastos y despilfarros sociales", refiere uno de los puntos del documento, así como "mantener e incrementar denuncias de corrupción y responsabilizar directamente al régimen de supuestas ineficiencias y negligencias en combatirla".
El documento de 23 puntos orienta a la oposición boliviana a "apoyar la normalización de las relaciones de Bolivia con Estados Unidos", para restar fuerza a las denuncias sobre la injerencia norteamericana y "justificar el contacto directo entre nuestras fuerzas afines en el exterior".
Igualmente, estimular la división "entre sectores obreros, sindicales y del régimen, mediante la asignación de recursos a varios de sus líderes", y reforzar las divisiones de las fuerzas populares en coordinación con los dueños de medios de comunicación privados.
El texto indica a los miembros de la oposición boliviana que gestionen el incremento de sus fondos ante el Departamento de Estado y su Oficina de Negocios en Bolivia, con organismos internacionales y la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
También les señala que pueden solicitar recursos a las instituciones estadounidenses "Fundación Nacional para la Democracia (NED), Instituto Nacional Demócrata para Asuntos Internacionales, Oficina de Iniciativas Transitorias y el Instituto Republicano Internacional".
La consigna que buscarán posicionar como parte del "Plan Estratégico para Bolivia" es "Cambiemos hacia una Alternativa Democrática", tratando de deslegitimar los conceptos nacionalización y redistribución de la riqueza, que ha promovido el presidente Morales en su gestión de gobierno.
Asimismo, invita a la oposición a promover opiniones de líderes del Club de Madrid (Organización integrada por ex Jefes de Estado y de Gobierno quienes opinan y debaten entorno a la "democracia") en favor de estas ideas para extender por todos los medios "la imagen de una grave crisis política e institucional en Bolivia", y "visibilizarlo como un país con perseguidos, presos y exiliados políticos".
Finalmente, hacen alusión a preparativos de un eventual golpe de Estado contra el presidente Evo Morales. "Contactar con grupos de militares en servicio activo y en condición de retiro, ya identificados, para ampliar la campaña dirigida a restarle prestigio al gobierno dentro de las Fuerzas Armadas".
Los lineamientos concluyen diciendo que "es vital preparar a los militares para que a partir de un escenario de crisis y conflictividad social interna, encabecen la insurrección contra el régimen, o al menos que apoyen una intervención extranjera o un levantamiento civil".
El "Plan Estratégico" ordena a la oposición "mantener e incrementar la campaña contra la injerencia venezolana y cubana, para afectar la imagen y restarle apoyo popular al gobierno", así como difundir materiales impresos y audiovisuales que expandan sus matrices de opinión.
Continuidad y estabilidad
Este martes el presidente de Bolivia, Evo Morales, declaró en entrevista con la televisora Red Uno de Bolivia, que el pueblo "apuesta por la continuidad, la estabilidad económica y la revolución pacífica" y percibe las intenciones de restaurar el modelo económico neoliberal para frenar el exitoso modelo económico plural comunitario.
Expresó que "votar por el 'Sí' en el referendo es votar por la estabilidad social, económica y política, y votar por el 'No' es volver al pasado", al tiempo que afirmó que en su Gobierno se recuperó la soberanía, la dignidad y la patria.
Morales acotó que aceptó una nueva repostulación, planteada por las organizaciones sociales, para cumplir con los preceptos de la Agenda Patriótica 2025 y las inversiones programadas en todo el país en atención a la demanda del pueblo expresada en los nueve departamentos del país.
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