La nueva cámara Polaroid Snap, que imprime fotos
instantáneas sin tinta, ya es un verdadero furor pese a que aún no salió al
mercado. Los expertos en la materia aseguran que será un éxito de ventas
porque, además de contar con 10 megapíxeles, sólo costará 99 dólares.
Polaroid ha lanzado otras cámaras instantáneas, pero eran
todas grandes, voluminosas y caras. La calidad de imagen también era bastante
regular, a pesar del hecho de que esas cámaras tuvieron la misma resolución que
la Snap.
La cámara Snap es como un juguete y es allí donde radica su
encanto. En la parte superior se encuentra un gran botón rojo y un botón de
disparador automático para selfies. A la izquierda, hay un botón para cambiar
entre los modos (color, sepia y blanco y negro), junto con un botón más pequeño
para alternar el marco de encendido y apagado (vintage).
La cámara es mucho menor que su predecesora, la Z2300, y
aproximadamente tiene las mismas dimensiones que la Zip Photoprinter.
Las fotos de 2 x 3 salen del lado derecho y, en el lado
izquierdo, hay un puerto micro USB para cargar la batería incorporada y una
ranura para tarjetas micro SD para almacenar fotos; ya que no hay
almacenamiento interno. Un trípode de montaje se encuentra en la parte
inferior.
La parte más encantadora es la forma en que se enciende y
apaga: basta con pulsar sobre el visor, que está en la parte superior de la
cámara. La compañía apunta a lanzarla a finales de este año.
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